El Hombre Lobo

El día de ayer fui a ver El Hombre Lobo. Imaginé que sería una película de suspenso, terror y demás cosas que no me gustan, por lo que no pensaba verla ni suiqera en renta. Alrededor de las seis de la tarde mi esposa me avisó que ya habían comprado los boletos y que íbamos a ir, así que como buen esposo tomé la decisión de ir al cine y ver esta película.
     No soy crítico de cine; sólo soy una persona que le gusta ir al cine a divertirse y, si es posible, hacerlo mientras veo una buena película. Bueno, en este caso las dos ideas básicas para pasar dos horas de vida en una sala de cine no se cumplieron: no me divertí y no es una buena película.
     La trama es sencilla, un hombre llamado Lawrence Talbot (Benicio del Toro) regresa a su pueblo en inglaterra por el asesinato de su hermano. Al llegar se da cuenta de que hay algo más detrás de un simple asesinato, su padre (Anthony Hopkins) es el hombre lobo que mató a su madre en una luna llena. Durante la película, Lawrence es atacado por el hombre lobo y se contagia de licantropía, esa enfermedad incurable que convierte a los seres humanos en bestias cuando hay luna llena.
     Después de una hora de película me quería salir, pero íbamos con amigos y habría sido algo poco cordial, cosa que no me habría importado ya que lo menos cordial fue llevarnos a ver esta película.
     Benicio del Toro, Anthony Hopkins y Hugo Weaving protagonizan esta historia; no puedo decir nada malo de las actuaciones ya que creo que es lo poco rescatable de la película. Por otro lado, los efectos especiales también son buenos; sin embargo el concepto del diseño de los hombres lobo si deja mucho que desear, sobre todo en la última batalla entre padre e hijo.
     Al final lo único que me resta es decirles que si van a pasar dos horas en una sala de cine, esta no es la mejor opción. Ahora entiendo por qué tenía sólo 30% de aceptación en Rotten Tomatoes.
     Se me olvidaba, algo que valió la pena de ayer fue la sala de cine. Cinemex Platino de Interlomas, los asientos muy cómodos, el sonido excelente y el chocolate con menta que te dan al salir de la sala está muy rico.